La Maestra Argelia Mercedes Laya López. Aportes al imaginario afrodescendiente venezolano (1926 - 1997)1
Teacher Argelia Mercedes Laya López. Contributions to the Afrodescendant venezuelan imaginary (1926 - 1997)
A Professora Argelia Mercedes Laya López. Contribuições ao afrodescendiente imaginário venezuelano (1926 - 1997)
José Pascual Mora
García2
Universidad
de Los Andes Táchira (Venezuela)
Grupo de investigación HISULA - UPTC
Grupo
HEDURE
Recepción: 31/01/2016
Evaluación: 17/04/2016
Aceptación: 09/06/2016
Artículo de
Investigación
RESUMEN
El presente estudio analiza los imaginarios sociales que potenciaron la cultura afrodescendiente en la sociedad venezolana, tomando como referente metodológico la historia de las mentalidades e imaginarios sociales, y teniendo referencia el caso de la luchadora social y maestra Argelia Mercedes Laya López (1926-1997). La maestra Argelia Laya es de origen afrodescendiente y se destacó por cultivar los "andamios mentales" de los derechos de los afrodescendientes y sobre todo en su trabajo en la reivindicación de los derechos de la mujer sin distinción de color o clase social. Su condición de luchadora social y su rol de maestra contribuyó a minar la yuxtaposición de culturas sectarias en Venezuela y el desarrollo de los derechos en igualdad por una cultura de la venezolanidad afrodescendiente. A manera de conclusión, el estudio del imaginario social en Argelia Laya nos permite señalar que su aporte fundamental radica en la reivindicación de lo afrodescendiente con criterios de igualdad de clases, incluso más allá de lo étnico, su lucha es la lucha de todas las mujeres sin discriminación.
Palabras clave: Imaginarios, afrodescendiente, mentalidades, historias conectadas.
ABSTRACT
This study analyzes the social imaginaries that fostered the Afrodescendant culture in Venezuelan society, the history of mentalities and social imaginaries were the methodological referents, having as source the case of the social activist and teacher Argelia Mercedes Laya López (1926-1997). The teacher Argelia Laya is of African descent and stood out for developing the "mental scaffolding" for the rights of Afrodescendants and mainly for vindicating the rights of women regardless of color or social class. Her status as social activist and her teacher role helped undermine the juxtaposition of sectarian cultures in Venezuela and the development of equal rights in a culture of Afrodescendant venezuelans. To conclude, the study of the social imaginary in Argelia Laya allows us to point out that her main contribution lies in the vindication of Afrodescendants with criteria of class equality, even beyond ethnicity, her struggle is the struggle of all women, without any discrimination.
Keywords: Imaginary, afrodescendant, mentalities, connected stories.
RESUMO
O estudo presente analisa os imaginário sociais que desenvolveu o afrodescendiente de cultura na sociedade venezuelana, sendo o referente metodológico a história das mentalidades e imaginário sociais e tendo referência o caso da lutadora social e professora Argelia Laya (1926-1997). Argélia Laya é de ascendência Africano e foi ela destaque para o cultivo dos "andaime mentais" dos direitos de ascendência Africano e, especialmente, o seu trabalho em reivindicar os direitos das mulheres, independentemente da cor ou classe social. Seu condição como ativista social e seu papel do professor ajudou a minar a justaposição de culturas sectárias na Venezuela e no desenvolvimento da igualdade de direitos em uma cultura de venezolanidad de ascendência Africano. Em conclusão, o estudo do imaginário social na Argélia Laya nos permite mostrar que sua principal contribuição encontrase na reivindicação de ascendência Africano com critérios de igualdade de classes, mesmo para além etnia, sua luta é a luta de todas as mulheres sem discriminação.
Palavras-chave: Imaginário, afrodescendiente, mentalidades, histórias conectadas.
"A defender nuestra condición de mujeres y de negros 'ustedes son hijos de un negro, ustedes no deben aceptar nunca que los humillen por negros y ustedes son mujeres y tienen que defender su condición de mujeres'. Cuando alguien dice, no, es que tu eres una mujer excepcional, les digo que lo que pasa es que tuve la ventaja de tener una madre como la que tuve y un padre como el que tuve, que me enseñaron y me dieron las oportunidades para desarrollar desde pequeña eso, una actitud de rebeldía ante las injusticias, ante las cosasfeas (...) y cultivar el amor por los demás"
Argelia Laya
INTRODUCCIÓN
El concepto de los afrodescendientes ha sido abordado en Venezuela por la biografía histórica desde la década de los 80 del siglo pasado, al interno de la llamada Escuela de Historiadores fundada por Federico Brito Figueroa. Aun cuando reconocemos los trabajos precursores de Miguel Acosta Saignes3 y ErmilaTroconis de Veracoechea,4 o desde la antropología las contribuciones de Angelina Pollak-Eltz,5 Jesús García6, y Michaelle Ascencio.7
En el trabajo se presenta un estudio preliminar sobre las tendencias historiográficas y los aportes al concepto de los afrodescendientes, así como un estudio de los "andamios mentales" que contribuyen a la consolidación de la mentalidad afrodescendiente en la venezolanidad, para lo cual retomo como metodología la historia de las mentalidades. No sin antes alertar lo polémico que resulta también del término afrodescendiente, el cual es aceptado por unos y rechazado por otros, e incluso enriqueciendo nuevos términos como afroindianidad (afrodescendientes e indígenas). Apostamos por otra parte, a una revisión transhistórica8 de lo afrodescendiente, pues el problema del tratamiento histórico lo asumimos en el sentido marcblochiano de estudiar el "presente por el pasado y el pasado por el presente."
El concepto de afrodescendiente fue dando forma como categoría a partir de la publicación del libro de Marcial Ramos Guédez9 (1980): Bibliografía afrodescendiente, a quien podríamos considerar el pionero de categoría afrodescendiente,10 epistemológicamente hablando.11
Los estudios históricos e historiográficos acerca de la negritud en Venezuela se remontan a la Ley de Abolición de la Esclavitud en Venezuela (1854), sin embargo, la historiografía oficial solo se interesó en el tema la negritud como discurso central durante el siglo XX; siendo uno de los pioneros Pedro Manuel Arcaya.12 Pero los primeros estudios sistemáticos se realizaron con Miguel Acosta Saignes (1948)13, los padres fundadores de las tendencias historiográficas en Venezuela siguieron dependientes del concepto de la negritud; así tenemos que Federico Brito Figueroa (1964)14, el patriarca de la historia económica y social de Venezuela; Arcila Farias;15 Germán Carrera Damas (1964),16 el fundador de la tendencia historiográfica de la historia crítica. Y entre los más recientes tenemos a Marcos Andrade Jaramillo (1999) de la escuela de Brito Figueroa, y le sigue Reinaldo Rojas17 quien apuntala el concepto de Africanía (2004)18 siguiendo la tradición de Fernando Ortiz. A nivel regional en el estado Táchira se recuerda el Trabajo de Lucy Gómez.19
En nuestro caso queremos analizar unos primeros trazos sobre el imaginario colectivo de lo afrodescendiente en la construcción de la nación venezolana, trabajo que por cierto hace parte del Proyecto Internacional Maestras africanas y afrodescendientes en Colombia, Brasil, Guatemala, Venezuela y guinea ecuatorial siglos XX a XXI liderado por Diana Soto Arango del Grupo de Investigación: "La Ilustración en América Colonial" - Grupo de investigación (ILAC) y en el que participan Diana Yaneth Ayala, y Celina Trimiño. La participación de las redes iberoamericanas es otra de las fortalezas de este proyecto, y citamos a los co-investigadores: José Rubens Jardilino y Margaret Diniz (Brasil), Justo Cuño Bonito, Juan Marchena Fernández, Nayibe Gutiérrez, Ana Güil (España), Oscar López, José Cortez (Guatemala), José Pascual Mora (Venezuela), Carmen Lago, Diana Lago, Rina de León, Gabriela Hernández, Cecilia Correa, Jhon Alex, Rafael Díaz (Colombia), Martha Corberth, Aracelli Duffus (Jamaica), entre otras.
Como vemos, Venezuela hace parte del proyecto Internacional a través del Grupo de Investigación Hedure de la Universidad de Los Andes-Táchira coordinado por José Pascual Mora. A continuación presentamos los pivotes fundamentales sobre los que descansa la reivindicación de los afrodescendiente en Venezuela y que sirven de soporte de nuestra investigación:
1. Contribuciones a la cultura afrodescendiente en la Carta Magna o Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela (1999) y la construcción de un marco legal y social sobre la discriminación afro, entre ellos destacamos: la Creación del Consejo para el Desarrollo de las Comunidades Afrodescendientes (2012), Aprobación de la Ley contra la Discriminación Racial (2011), Inclusión de afrodescendientes en el censo nacional (2011), Aprobación de la Ley Orgánica de Educación (2009) que reconoce la afrodescendencia, creación de la Comisión Presidencial para la prevención y eliminación de todas las formas de discriminación racial en el sistema educativo (2005), celebración de mayo como el Mes de la Afrodescendencia y el 10 de mayo como el Día de la Afrovenezolanidad (2005), creación de la Oficina de Enlace con las Comunidades Afrodescedientes del Ministerio del Poder Popular para la Cultura (2005), creación de un Viceministerio para Relaciones Exteriores con África, donde Venezuela tiene ahora 18 embajadas (2005), Creación de misiones sociales para reducir la pobreza entre los grupos históricamente marginados (desde 2003), aumento del índice de registro electoral de 97% debido a las campañas cívicas dirigidas a aquellos privados del derecho a votar en áreas remotas y rurales del país (desde 2001), aplicación de la nueva Constitución, la cual establece que la República Bolivariana de Venezuela es una "sociedad multicultural y multiétnica" guiada por el principio de igualdad entre las culturas (1999).
2. El desarrollo de los imaginarios afrodescendientes a través de las Cátedras Libres de la Mujer Afrodescendiente en las universidades venezolanas, en especial queremos destacar la Cátedra Libre África y La Cátedra Libre Argelia Laya. La Cátedra Libre África ha sido creada en algunas universidades venezolanas. El proyecto piloto fue inaugurado el 12 de junio de 2009, como espacio académico para la discusión e intercambio de la afrodescendencia en Venezuela y del aporte de los africanos a nuestra cultura; la primera Cátedra Libre África "Patrice Lumumba" fue creada en el Instituto Universitario de Tecnología Jacinto Navarro Vallenilla perteneciente a la Universidad Pedagógica Experimental Libertador núcleo de Carúpano. Esta iniciativa depende del Despacho del Viceministro para África y tiene como fin fomentar el conocimiento de diversos aspectos relacionados con la africanidad. A esta iniciativa se han sumado Ministerios, universidades, alcaldías, embajadas acreditadas en el país y misiones diplomáticas venezolanas en el continente africano.
3. La recuperación de los imaginarios afrodescendientes a través de la música, en especial, el "Calipso y la Maestra Isidora Agnes"; la imaginería mágico-religiosa20 afrodescendientes con el mito de "Marilionza" y la llamada Corte Negra; desde el punto de vista semántico, la revisión de las categorías "raza negra", "negritud", entre otras.
4. La revisión los manuales, libros y folletos publicados por Maestras afrodescendientes merecen un especial tratamiento. En nuestro estudio teniendo como referencia el caso de la luchadora social y maestra Argelia Laya (1926-1997). La maestra Argelia Laya es de origen afrodescendiente y se destacó por cultivar los "andamios mentales" de los derechos de los afrodescendientes y sobre todo en la reivindicación de los derechos de la mujer sin distinción de color o clase social. Su condición de luchadora social y su rol de maestra contribuyó a minar la yuxtaposición de culturas sectarias en Venezuela y el desarrollo de los derechos en igualdad por una cultura de la venezolanidad afrodescendiente. Igualmente en los Manuales Escolares queremos hacer un tratamiento del uso semiótico y semiológico de lo afrodescendiente, especialmente, una revisión en los Manuales de la Colección Bicentenaria.
5. Estudiar el impacto de las políticas educativas para las poblaciones afrodescendientes, para revalorar lo afrodescendiente en comunidades como Barlovento (Estado Miranda), El Callao (Estado Bolívar), Palmarito y Bobures (Estado Mérida), etc.; el Ministerio del Poder Popular para la Mujer impulsa la Misión Negra Hipólita para trabajar con las personas en situación de calle y otras carencias, víctimas de la exclusión, estos programas recuperan en el imaginario colectivo, el aporte a la construcción de la nación de las esclavas africanas que amamantaron a Bolívar, pues de pecho esclavo recibió Bolívar la inspiración de luchar por los ideales ilustrados: Libertad, Igualdad y Fraternidad, fueron sus nanas al quedar huérfano, las que en sus cantos de arrullos alimentaron el sueño de la libertad; el programa "Negra Matea" también ha servido en esta dirección, destacamos la inauguración de un Centro de Educación Inicial (CEI) "Negra Matea" (2014), pero señalamos a su vez que en las políticas de Estado, ya existía antes de 1998, un programa que recuperaba el imaginario afro en los niños escolares llamado Ropero Escolar "Negra Matea".
6. El reconocimiento del procerato afrodescendiente en los héroes de la independencia,21 con el negro Pedro Camejo; el estudio de las maestras afrodescendiente que como madres han contribuido a la "igualación" de la sociedad venezolana al formar alumnos que llegaron a ser presidentes de la república y grandes intelectuales como Luis Beltrán Prieto Figueroa (Ministro de Educación (1948) y líder político, pedagogo pionero de la Escuela Nueva en Venezuela), grandes historiadores como Federico Brito Figueroa (fundador de la Escuela de Historiadores en la Historia Económica y Social, y la tradición de la Escuela de Annales en Venezuela), y Reinaldo Rojas (discípulo de Brito Figueroa y relevo de la Escuela de Historiadores fundada por el maestro).
7. Por último queremos hacer un estudio sobre las propuestas de organismos internacionales como la ONU a través del Instituto de Estudios Humanitarios (IEH) del cual formamos parte como IEH nodo San Cristóbal. En los años 90 la UNESCO proclamó el 23 de agosto de cada año: Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición, en homenaje al levantamiento que se produjo en la isla de Santo Domingo (en la actualidad, Haití y República Dominicana); la noche del 22 al 23 de agosto de 1791 marcó un antes y un después al régimen esclavista, e impulsó el proceso de la abolición de la trata de esclavos trasatlántica. La Conferencia General en su 31a reunión invitó a la Asamblea General de las Naciones Unidas a proclamar en el año 2004, el Año Internacional de conmemoración de la Lucha contra la Esclavitud y de su Abolición. El denominado proyecto de la Ruta del esclavo nació en 1993 gracias a una propuesta de Haití y algunos países africanos durante la 27 Conferencia General de la UNESCO; y como investigadores queremos articular los temas básicos que contribuyen a esa lectura transhistórica, anteriormente mencionada, con los conceptos de verdad histórica, memoria colectiva, diálogo pluri-intercultural, desarrollo sostenible y sustentable, y paz.22
Parece ambiciosa nuestra propuesta, pero queremos ir aportando ideas para el debate. En el presente estudio destacaremos el aporte de la maestra y líder político Argelia Laya en la construcción de la cultura afrodescendiente. Es bien sabido que Argelia no hablaba de la recuperación de lo afrodescendiente, sino del respeto a ser iguales sin distingo del grupo étnico. No obstante, queremos aportar sus ideas que permiten fraguar la recuperación de los imaginarios sociales invisibilizados por la cultura dominante preñada de la razón patriarcal.
1. El concepto de imaginario colectivo en los estudios de la mujer afrodescendiente
Nuestro trabajo forma parte de una línea de investigación sobre la historia de las mentalidades, representaciones e imaginarios sociales.23 De manera que cuando hablamos de "andamios mentales", además de retomar la categoría de L. Febvre, nos remitimos a la tradición historiográfica francesa inaugurada por Marc Bloch y Lucien Febvre. Desde los setenta surgen diversos criterios científicos que reivindican el concepto del imaginario o lo imaginario, tanto en el campo de la filosofía (Cornelius Castoriadis) como de la historia (Jacques Le Goff). Pero también la antropología hace lo propio; la obra de Gilbert Durand se remonta a los años sesenta cuando publicó: Estructuras Antropológicas de lo Imaginario; Heredero de la tradición de Mircea Eliade, Gaston Bachelard, Claude Levi Strauss, y Paul Ricoeur, quien ha sabido conciliar el estructuralismo figurativo y las corrientes hermenéuticas.
En este sentido, hemos abordado como ejemplo del estudio el problema del imaginario social bolivariano,24 para demostrar la presencia de los anclajes del mismo en la memoria social; "La investigación de los imaginarios no tiene nada que ver con ficciones, como comúnmente se entiende. Lo imaginario alude a las imágenes mentales y visuales organizadas por la narración mítica de cada individuo, de cada pueblo, de cada nación. El enfoque tiene que ser interdisciplinario, por eso tendríamos que decantarlo desde el análisis de la memoria (Halbwachs, 1994), de la memoria colectiva (Bloch, 1994), del utillage mental (Febvre, 1993), de las formas simbólicas (Cassirer, 1972), y sus respectivas memorias o mentalidades; en fin no puede abordarse en forma plana. Como dice Evelyne Panthagean (1996) la historia de lo imaginario es una cuestión demasiado amplia pues sus dominios abarcan desde la historia de las religiones hasta la historia de la literatura."25
Esta complejidad del debate es clave para el trabajo objeto de estudio, preguntarse por el imaginario social o colectivo de Argelia Laya, es preguntarse por la historia de la razón patriarcal y el ocultamiento de la mujer como agente social de transformación; es preguntarse por el silencio que la historia hace de la mujer en sus trabajos; es preguntarse por la discriminación doble, por ser mujer y por ser afrodescendiente; es preguntarse por la forma dialéctica de la negación ejercida desde la colonia y la república, desde las heroínas hasta las mujeres "amas de casa" que hicieron posible el proceso de construcción de la nación; este es un reto que permite el siguiente trabajo incorporar en la historia de la mujer venezolana.
Cuando revisamos las publicaciones de los centros académicos26 sobre la historia de la mujer afrodescendiente27 nos damos cuenta que ha sido soslayada y negada en la mayoría de los textos. Los trabajos que más se destacan en esta dirección son los de Ermila Troconis de Verachoechea,28 Elias Pino Iturrieta,29 y últimamente, Inés Quintero.30 El mismo Diccionario de la Historia de Venezuela ni siquiera hace mención, sus contribuciones, a no ser por los segmentos que destacan la historia de las primeras damas o de las nobles, porque las otras están invisibilizadas o parecieran que no han existido en la historia.
Pero no es un problema solo de la investigación histórica en Venezuela como bien nos apunta Edda Samudio: "la historia de las mujeres como segmento particular de la ciencia histórica, o espacio específico de la disciplina es de institucionalización reciente; sus preludios académicos se vinculan tanto a la renovadora Escuela de los Annales, proyectada por Marc Bloch y Lucien Febvre cuando fundaron la revista Annales de historia económica y social en 1929, escuela impulsora de la Nueva Historia, de una nueva noción de la historia, al ampliar el horizonte temático con la vida cotidiana, el trabajo, la familia, y las mentalidades, al ámbito de interés historiográfico."31
2. Argelia Laya en el imaginario colectivo venezolano
Argelia Mercedes Laya López (1926-1997) nació un 10 de julio de 1926 en Barlovento. Barlovento es una sub-región ubicada en el Estado Miranda de Venezuela y desde el punto de vista étnico la mayoría de la población fue traída de lo que actualmente constituye el Congo, Zaire (o Congo Belga) y Angola (correspondiente al área cultural de la etnia africana Bantú, Loangos y Yorubas). Esta son las raíces de Argelia en el tiempo de larga duración. Fue la tercera hija de los esposos Rosario López (militante de la "Agrupación Cultural Femenina") y el Coronel Pedro María Laya; nace en una hacienda de cacao: Las Mercedes, en la cual pudo recrear los imaginarios ancestrales que la conectaron con la resistencia de los esclavos que formaron parte de la fuerza de trabajo de esas haciendas. Su madre tuvo 5 hijos, de los cuales uno de ellos murió a temprana edad. Pedro, poeta, abogado y político fue el hermano mayor; Fiel Luz, servidora pública jubilada; Argelia y después Renée.
La niña Argelia se crió en tiempos de dictadora en Venezuela. Y aunque su padre, Pedro María Laya, participó en la resistencia contra los gobiernos dictatoriales de Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez, seguramente la atmósfera mental de la resistencia estudiantil de la Generación del 2832 tuvo trascendencia en su mentalidad emancipatoria.
Se comenta que tuvo una salud frágil. Razón por la cual fue tardía su incorporación a la escuela primaria. Con su hermano Pedro jugaban a "Los Caciques": "era nuestro juego preferido (....). Para ser Cacique, yo me sometía a las pruebas y yo ganaba todas (...) comer picante, brincar por encima de la candela, herirnos con cosas cortantes, subir palos, correr por la playa"33 Se observa ya en su personalidad incipiente una actitud proactiva y decidida hacia la heroicidad, lo cual le deparó en el futuro luchas decisivas. Pero sobre todo, destacamos su lucha por la igualdad entre los géneros. El "Cacique" siempre fue una figura masculina en la estructura de poder indígena, y observamos en su declaración que asumía la imagen masculina, seguramente como reto simbólico a la estructura de poder patriarcal.
La educación primaria en la época que Argelia inicia la escuela estaba caracterizada por ser el tránsito entre la educación tradicional, caracterizado por el "romanudo" sistema de enseñanza de la "letra con sangre entra", y la emergencia de la escuela nueva en Venezuela. Ya que para 1936, se inicia la enseñanza del método de la escuela activa, a partir del 21 de febrero de 1936, cuando el presidente de la república López Contreras pronunció su conocido Programa de febrero, considerado como el I Plan de la Nación. En 1936 el Gobierno venezolano de López Contreras diseñó un plan de la formación de maestros y profesores, para lo cual se solicitó la intervención de las misiones extranjeras; de Costa Rica se trajo al eminente maestro organizador de las Escuelas Normales, don Joaquín García Monge; de México la distinguida pedagoga doña Elena Torres, organizadora de las Escuelas rurales y contratada en Estados Unidos para desempeñar distintas funciones relacionadas con la Educación Campesina; de Chile una misión pedagógica para trabajar en la Educación Primaria: Daniel Navea Acevedo, que fue en Chile jefe de Escuelas Normales y perfeccionamiento del profesorado, y para trabajar en Educación Secundaria los profesores Julio Heise, Armando Lira, Oscar Martin, Humberto Parodi, y Horacio Aravena; del Uruguay vino el profesor Salvador Fuentes, para trabajar en las Escuelas Experimentales.
Es una época de efervescencia del movimiento pedagógico, en 1932 se fundó la Sociedad Venezolana de Maestros de Instrucción Primaria; institución que convocó la Primera Convención Nacional del Magisterio en 1936. En ese evento se promulgaron las normas para el magisterio, con especial énfasis en los Derechos del Niño, siendo por antonomasia la primera manifestación de una política curricular inspirada en la Escuela Nueva y organizada por el magisterio. Apareció la Revista Pedagógica de la Sociedad de Maestros de Instrucción Primaria (1932), en la que participaron colaboradores como: Miguel Zuniaga, Roberto Martínez Centeno, Luis Padrino, Alirio Arreaza, Hipólito Cisneros y Cecilia Oliveira. Ya se comienza a observar el liderazgo femenino con la presencia de la maestra Cecilia Oliveira. Y sobre todo queremos destacar la presencia de Luis Beltrán Prieto Figueroa,34 maestro de origen afrodescendiente que desarrolló el modelo pedagógico más completo de la Escuela Nueva, con su método del Humanismo Democrático, llegando a alcanzar liderazgo significativo en la política nacional.
Estos cambios en el sistema educativo de la época fueron sembrando en la adolescente actitudes de lucha que la llevaron a alcanzar el liderazgo gremial y social que más tarde se notaría. Pero lo significativo es que sus hermanas ya comentan que estaba en su naturaleza habitual; su hermana menor, Renée, comenta: "hicimos toda la primaria juntas, pero Argelia estaba mucho más adelantada que yo y que la mayoría de las otras niñas (...). Destacó durante todos los grados como la mejor del grupo, lo que no dejó de molestarme porque las maestras estaban siempre diciéndome, "¿Y Ud. por qué no sigue el ejemplo de su hermana Argelia que es tan buena alumna? Debo dedr que Argelia me enseñó que el talento por sí solo no basta para prepararse ni para los exámenes, ni para la vida. Además me enseñó a estudiar (...) Creo que fui su primera alumna. Pero no fui la única de sus compañeras de clase que se benefició de su inteligencia y conocimientos. Recuerdo también que su capacidad de liderazgo y organización fueron obvias desde temprano. Fiel Luz solía decir y, yo por supuesto estoy parafraseando, "A Argelia sí que le gusta organizar y decirle a uno lo que tiene que hacer". Cuando nuestra madre nos asignaba las tareas domésticas, Argelia era la que siempre hacía el plan de trabajo, nos organizaba y terminaba asignando actividades específicas a cada quien."35
La formación educativa la continúa en Caracas, en unas condiciones económicas precarias, logra demostrar sus dones de liderazgo llegando a presidir la Sociedad de Jóvenes de la Iglesia Evangélica "El Redentor", igualmente fue co-fundadora del Primer Centro de Estudiantes Novelistas, mientras estudiaba en la Escuela Normal de Caracas, conocida como la Escuela Normal Miguel Antonio Caro. Su vocación docente la alternó con el servicio social "Se gradúo de maestra normalista en 1945 en la promoción "José María Vargas". Nunca la rasparon. En el lapso entre los 15 y 19 años es Secretaria de Cultura del Centro de Estudiantes Normalistas, Directora del Periódico del mismo Centro de Estudiantes, Secretaria General de la Federación de Jóvenes Evangélicos y un poco más tarde, dirigente de la Unión de Muchachas de Santa Rosalía, del Centro Cultural y Deportivo de El Cementerio al igual que de la Junta de Vecinos de la urbanización "Pedro Camejo" y del Comité de Madres del Centro Materno Infantil de Sarriá".36 Es de hacer notar que esta labor la lleva a cabo en las barriadas más populosas del oeste caraqueño, sectores de las clases obreras y empobrecidas.
Un maestro de escuela en la época que se gradúa Argelia recibía uno de los sueldos más bajos. Es el año 1945, época de la revolución de octubre del 18 de octubre, se inicia un proceso nuevo en la Venezuela postgomecista. Emerge el liderazgo de Acción Democrática con Rómulo Betancourt37 a la palestra, junto a la presencia de los militares en el poder, encabezados por Marcos Pérez Jiménez. En este enrarecido clima político Argelia inicia la docencia: "Al obtener su título de maestra contaba con 19 años. Aspiraba viajar a Guayana para ejercer la docencia, pero no aceptaban mujeres. Luego quiso ir para Santa Elena de Guairén, sin embargo, aprovechando que había baja de maestros fue asignada al Estado Zulia ganando 300 Bolívares mensuales. En diciembre del 45 retorna a Caracas a visitar a su mamá. En el interín cae el Presidente Medina; sube Betancourt y al maestro Prieto Figueroa lo nombran Secretario de la Junta de Gobierno. La envían para La Guaira a realizar una campaña de alfabetización, específicamente en el Colegio República de Panamá"38
El sueldo de un maestro era 300 bs y equivalen a 90 dólares de la época, y precisamente fue el presidente Rómulo Betancourt quien hizo un incremento en los sueldos, a lo que señala: "encontramos al llegar al Gobierno que de cada 100 maestros en servicio, 70 carecían de títulos profesionales. En 1942, con el pretexto de la Guerra Mundial, se les había rebajado los sueldos en un 10 %. El sueldo-base del maestro graduado era de 340 bolívares y el del maestro sin título de 230 bolívares. Se elevaron esos sueldos a 500 y 350 bolívares, respectivamente. Fueron aumentados en un 75 % emolumentos del magisterio, sin contar otros beneficios sociales acordados a ese sector."39
Argelia Laya se forma inicialmente en las filas del partido Acción Democrática,40 para la época un partido de raíces comunistas y socialistas, especialmente las inspiradas en el Plan de Barranquilla de Rómulo Betancourt, que sirvió de instrumento ideologizador para que llegaran las primeras ideas de izquierda a nuestro país en el siglo XX.41 Sin embargo, se retiró en los años 50, cuando "Acción Democrática había olvidado su programa (...), su política, su estrategia y sus planes de gobierno no se correspondían a las necesidades del país y mucho menos a la oferta que, como partido político, había hecho a los venezolanos (...) En el año 50 estaba cansada de las inconsecuencias de los (...) dirigentes de AD, que convocaban a la base, yo era de la base, para participar en acciones de carácter clandestino y llegada la hora, no se aparecían los responsables".42 Corrían los años de la década del 50, tiempos de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, época de persecuciones políticas y de muertes de líderes fundamentales de la democracia, como Leonardo Ruiz Pineda.
La actividad gremial fue intensa, "participaba como Secretaria de Organización adjunta de la Federación Venezolana de Maestros y en el Colegio de Profesores de Venezuela, en La Guaira colaboró activamente en la Junta Directiva de la Asociación de Periodistas y Escritores de La Guaira, y fue Vicerrectora de la Universidad Popular "Víctor Camejo Oberto". Funge por la misma época como Secretaria de Organización en la Unión Nacional de Mujeres, y en la Legión de Mujeres Nacionalistas. Es realmente impresionante la capacidad de entrega y dedicación que Argelia dispuso en la lucha por un mundo mejor, y más aún, tomando en cuenta que todas estas actividades se realizaban dentro del "ojo del huracán", es decir, en plena dictadura Pérez Jimenista bajo las punzantes miradas inquisidoras del régimen. Sin embargo, obedeciendo a sus principios justicieros, ya hacía rato se había incorporado clandestinamente al partido que adversaba a la dictadura, Acción Democrática. Al tiempo, se retira transitoriamente de esta agrupación y se reincorpora antes de la caída de Betancourt en el 48."43
Durante estos años iniciales en el magisterio, sufre la discriminación contra la mujer por no tener derechos al salir embarazada; "En esos primeros años de ejercicio docente y militancia política salió embarazada. Para esa época, tal como comenta ella misma en una entrevista de "Mujeres en Lucha" en 1984, las maestras no podían ser madres solteras; algunas se suicidaban, otras abortaban. A pesar de su situación resolvió tener a su primer hijo sola, asumiendo tal responsabilidad mediante una decisión individual y no religiosa. "Toda esa mitología y toda esa ridiculez que hay en relación con la despenalización del aborto, algún día se va a acabar, y se va a acabar en la medida en que las mujeres de hoy peleen más por tener ese derecho a decidir cuándo quiere ser madre y cuántos hijos quiere tener y cómo los quiere concebir y en qué momento". Acto seguido le escribe una carta dirigida al Ministro de Educación, Luis Beltrán Prieto Figueroa,44 apelando al derecho constitucional de Protección a la Maternidad independientemente de su estado civil. No le abrieron expediente pero fue suspendida durante unos meses por conducta "inmoral". En ese breve retiro Argelia dio a Luz, reintegrándose nuevamente a la faena a los pocos meses. A manera de castigo, fue asignada a dictar clases en una escuela de menor categoría; pero esto no afectó a su ego de ningún modo, ya que amaba enseñar, le brotaba espontáneamente y lo disfrutaba en donde fuera."45 Argelia se inscribe históricamente en la tradición iniciada por María de Zayas y Sotomayor (1637) en su lucha en España por la reivindicación de la educación femenina; es heredera de la representación femenina de la independencia, con Dolores Montilla de Cazado, quien asistió a la memorable reunión de la Sociedad Patriótica en 1811; de la tachirense María del Carmen Ramírez de Briceño, quien junto a Serrano de García e Hevia (la heroína de Cúcuta) que son heroínas regionales tachirenses; hasta la sin igual Luisa Cáceres de Arismendi. Argelia desarrolló una visión moralizadora de la igualdad social y cultural de la mujer que nos recuerda los trabajos pioneros, en especial a Mary Wollstonecraft, quien inició la polémica en Gran Bretaña al publicar en 1790 su obra Vindicación de los derechos de la mujer. Y a John Stuar Mili (1869) con su ensayo La esclavitud femenina, en donde pensaba que la opresión de la mujer era el verdadero motivo que frenaba la marcha triunfante de la humanidad. Retoma lo positivo de las luchas feministas, pero al mismo tiempo guarda distancia del feminismo de Simone de Beauvoir, Margaret Meat, e Iris Zabala, porque como dijera el psiquiatra venezolano Fernando Risquez, a veces el feminismo también ha servido para desvirtuar la reivindicación de la mujer. Argelia ha sabido tomar distancia de aquellos discursos que potenciaron la sujeción de la mujer, que incluso se encuentra soterrado en el pensamiento de grandes filósofos Ilustrados como Jean Jacques Rousseau. En ese sentido, estaría más cerca de la Roxana de Daniel Defoe (publicada en 1724) que de la Julia de Rousseau en la Nouvelle Heolise (la Nueva Eloíse).
Argelia Laya es de la primera promoción de maestras que ingresan a la universidad a continuar sus estudios de docencia. Su labor docente es incansable, ejerce en sectores populares como profesora suplente de Psicología en la Escuela de Servicio Social y en el Colegio Los Jardines en el Valle. Su lucha por la mujer la lleva a incorporarse en la Unión de Mujeres Venezolanas y, desde ese momento, su compromiso político estuvo estrechamente relacionado a las luchas por la defensa de los derechos de la mujer. "No existía acto, mitin, conferencia, simposio concerniente a la defensa de los derechos humanos y, sobre todo, a los de las mujeres, pero también a los de las niñas y los niños, negras y negros, indígenas, las y los minusválidos, los económicos... a los que ella no asistiera."46 Su labor docente estuvo signada por el amargo destino de sufrir la discriminación como mujer, que seguramente alimentó la vena política e incluso hasta llegar a la lucha armada. Fue una verdadera heroína del siglo XX en la lucha por los derechos de la mujer.
3. Argelia como líder en la política
En momentos de la crisis política venezolana, la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, Argelia Laya ingresa a la Universidad, en 1950: "al Instituto Pedagógico de Caracas, del cual egresa en 1955 luego de concluir sus estudios en la novedosa carrera de Filosofía y Ciencias de la Educación. A partir de entonces mañanas y tardes enteras las dedica a dar clases de Educación Media. Por los años 50 la expulsan temporalmente del Pedagógico por represalias políticas. Entra a dar clases en un liceo privado y en la División de Higiene Mental Escolar, todo, sin abandonar sus gestiones contra el régimen. Se involucra intensamente en la lucha contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez desde las bases militando en el Partido Comunista de Venezuela y al mismo tiempo ayuda a organizar el Comité Femenino de la Junta Patriótica, ambos, implicados en el derrocamiento de la dictadura. Fueron aquellos los mejores años del Partido Comunista, justo después del 23 de enero del 58. Cuando cae "el Tirano" su participación en la política del país se hace patente; participa en las elecciones ese mismo año como candidata a Concejal por Caracas y Diputada por Miranda, ganando en esa oportunidad en Caracas y en Miranda obtiene el título de Diputada Suplente. Años después sería Concejal para el Distrito Sucre, el Distrito Federal y el Estado Miranda, así como Diputada al Congreso de la República (repetidas veces)."47
Un testigo de excepción nos narra la vinculación de Argelia con la resistencia al régimen: "Siempre recuerdo cómo mi padre nos narraba, a mí y mis hermanos, con evidente emoción cada 23 de enero, las vicisitudes por la que pasaron, los militantes del Partido Comunista de Venezuela, en los días previos al levantamiento popular. En esos días, nos contaba, se había salvado en la rayita, de que lo encarcelaran, porque al detenerlo una patrulla de la Policía Militar, frente al Liceo Fermín Toro, cuando distribuían volantes con llamados al paro general, logró milagrosamente deshacerse de ellas a través de una rendija de la "jaula" en donde lo montaron. Luego, al revisarlo y no conseguirle nada comprometedor, lo soltaron junto a otros estudiantes y obreros, en la avenida Sucre. En una casa de San Agustín del Norte, el Partido Comunista instaló una fábrica clandestina de bombas, allí la línea de producción la comandaba el ingeniero químico coriano José "Chente" Acosta. Allí trabajaban noche y día, manipulando explosivos caseros, altamente peligrosos, entre otros: Federico Montenegro, Argelia Laya, la queridísima y recordada "Negra", que luego se haría famosa por su combatividad. También estaban algunos militantes adecos, como Nela Carmona y Carlos Serra."48
A partir de 1959 se une a la lucha armada en el país, luego de participar en el Congreso Latinoamericano de Mujeres en Chile.49 Se incorpora formando parte del Partido Comunista Venezolano, es una etapa dura en la vida de Argelia Laya pues tiene que utilizar un pseudónimo en la clandestinidad, de allí nació su epónimo "Comandanta Jacinta", como se le conocía en las montañas del Estado Lara, región Centroccidental de Venezuela donde participó en la lucha armada, de esos momentos recordará tristemente que no pudo ver su madre en los últimos momentos de su vida;" "Para mí, en lo personal y en lo político fue una experiencia que me permitió aprender (...) la forma cómo vivían y viven los campesinos pobres de este país. De las cosas más terribles que vi fue el dolor tan grande que sentían los guerrilleros cuando participaban en una operación donde había soldados muertos. Ellos sentían que era una guerra entre hermanos y entre la gente de la misma clase. Eran los pobres de un lado, buscando un camino y una transformación por una vía que no nos condujo al triunfo, sino a una derrota; y los pobres del otro lado, defendiendo los intereses de los poderosos. Eso nos permitió iniciar una reflexión más profunda sobre lo que era la política, sobre lo que nosotros queríamos y la justicia que buscábamos. Cerca de los seis años estuvo dedicada a vida clandestina, tanto, que su madre murió sin ella alcanzar a verla. Tenía la certeza de que moriría ese año. Había recibido una de sus cartas una semana antes, y varios regalitos para el resto de los luchadores. Argelia llegó a contar: "Ella les hacía bolsitas para las medicinas, para los cigarros, les mandaba tarjetitas pintadas por ella, entonces, tenía un inmenso deseo de ir a verla y yo sabía que no me lo iban a permitir y es que el cerco era espantoso".50
Sin embargo, al final de sus días murió con un gran desencanto por la forma como la lucha política se había desvirtuado en los partidos políticos que contribuyó a fundar, como el MAS (Movimiento al Socialismo). Beatriz Domínguez, en el número 9 de la Revista Venezolana de Estudios de la Mujer cita un pequeño párrafo de dicha declaración: "Lo que ocurre hoy en el MAS, es una dramática crisis política, espiritual, ideológica, moral y ética que afecta a los partidos políticos y a otras organizaciones de la sociedad civil e instituciones donde (salvo honrosas excepciones) gran parte del liderazgo ha protagonizado un comportamiento y un discurso personalista, autoritario y negador de la democracia"51
Argelia Laya, una mujer sin duda que seguirá siendo testimonio de la conciencia de la lucha por los Derechos Humanos, no solo de la mujer sino de los negros, y de todos, como bien le gustaba afirmar. Por eso nuestro trabajo más que un estudio conclusivo es una mirada que busca reivindicar sus valores que han sido utilizados también con fines político-partidistas, que no siempre ayudan a la preservación de la memoria histórica, pues a veces se desvirtúa su aporte para ser manipulado.
"¡Nunca me he dejado humillar, ni por mujer ni por negra! Gracias a los valores que me enseñó mi madre y mi padre!"
Argelia Laya (Comandanta Jacinta)
A manera de colofón, señalamos que el imaginario colectivo "Argelia Laya" ha sido una obra a partir del año 2000 al dársele el epónimo de Argelia Laya a Centros de atención integrales "Simoncitos", escuelas, planteles de educación básica, liceos, hasta universidades. En Barlovento, en el estado Miranda, su tierra materna, se oficializó el nombre de una de las nuevas universidades con su epónimo: Universidad Politécnica Argelia Laya. Incluso un CDI52 que lleva su nombre; el Colegio Universitario de Caracas tiene la Cátedra Libre de la Mujer "Argelia Laya"; "la Cinemateca Nacional ha programado actividades para honrar a Argelia en la fecha de su nacimiento; leímos también que existe la Orden Argelia Laya (condecoración de Estado) que otorga Inamujer; algunos comités de tierras urbanas llevan su nombre, lo mismo sucede con algunas empresas del Estado como la procesadora de plátanos que está ubicada en Barlovento y otra de actividad maderera en Anzoátegui; infocentros Argelia Laya en algunas comunas; Hay Casas de la Mujer y Casas de Abrigo con el nombre de Argelia. Y el Instituto Autónomo de la Mujer "Argelia Laya" del Municipio Libertador, Caracas."53 Existe la Red Argelia Laya que agrupa a maestros, profesores, estudiantes universitarios, sociedad civil, consejos comunales, etc. para generar ideas críticas con respecto a las políticas educativas del Estado.
1 Este artículo es resultado de los proyectos de investigación "la Formación de las maestras rurales en Colombia y Brasil. Perspectivas de estudios comparados en Educación SGI 1730" y "Maestras africanas y afrodescendientes en Colombia, Brasil, Guatemala, Venezuela, Jamaica y Guinea Ecuatorial Siglo XX a XXI" SGI 1732, financiado por la Dirección de Investigaciones de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia y desarrollado por el grupo de investigación HISULA.
2 Doctor en Innovación y Sistema Educativo de la Universidad Rovira i Virgili, Tarragona, España. Doctor en Historia Económica y Social de Venezuela de la Universidad Santa María, DEA Historia de la Educación en la Universidad Rovira i Virgili, Magíster en Educación de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET), Filósofo de la Universidad Central de Venezuela. Actualmente es presidente de la Sociedad de Historia de la Educación Latinoamericana - SHELA integrante del grupo de investigación HISULA - UPTC y el grupo HEDURE. Email: amihedure@gmail.com
3 Miguel Acosta Saignes, Vida de los esclavos negros en Venezuela. Tercera edición. (Valencia: Vadell Hermanos, 1984)
4 Ermila Troconis de Veracoechea, "Estudio preliminar", en Documentos para el estudio de los esclavos negros en Venezuela. (Caracas: Academia Nacional de la Historia, 1969) 103.
5 Angelina Pollak Eltz, La familia negra en Venezuela. (Caracas: Monte Ávila Editores, 1976)
6 Jesús Chucho García, Encuentro y desencuentro de los saberes" En torno a la africanía latinoamericana", en: Estudios y otras prácticas intelectuales latinoamericanas. Coord. Daniel Matos. Caracas: Faces-UCV, 2002) 149; Jesús García, Nomenclatura de la trata negrera y la esclavización. (Caracas: Mimeo, 1986); Jesús García, Comunidades afroamericanas y transformaciones sociales. (Caracas: Clacso-UNESCO, 2002).
7 Michaelle Ascencio, Entre santos y changó. La herencia de la plantación. (Caracas: Faces-UCV, 2001)
8 Franz Lee, "Formas esclavistas transhistóricas presentes en la época de la globalización" en "150 años de la Abolición de la Esclavitud en Venezuela ¿Presente y pasado de una misma realidad?", eds. Hernán Lucena Molero y Julio César Tallaferro. (Estudios de Postgrado, Centro de Estudios de África y Asia "José Manuel Briceño Monzillo", Centro de Estudios Históricos "Carlos (Mérida: Universidad de Los Andes, Consejo de Desarrollo Científico, Humanístico y Tecnológico, Consejo de Emilio Muñoz Oraá", 2007).
9 José
Marcial Ramos Guédez, Simón Bolívar y la abolición de la esclavitud en
Venezuela 1810-1830. (Los Teques: Centro de Investigaciones
Bibliográficas Venezolanas, 1999)18.
Ramos
Guédez, José Marcial y Mendoza, Irma. José Silverio González y la abolición
de la esclavitud en Venezuela, 1850-1854. (Caracas: Universidad Santa
María. Centro de Investigaciones Históricas, 1990) 36. José Marcial Ramos
Guédez, y otros. Vidas venezolanas. (Caracas: Alfadíl Ediciones,
1983) 138.
10 Cfr. José Marcial Ramos Guédez, "La sociedad y la cultura afro y su importancia para la historia colonial de Venezuela" (Caracas: UCV, 1976). Otros trabajos José Marcial Ramos Guédez, Bibliografía afrovenezolana (1980), El negro en la novela venezolana, (Estado Miranda: Gobernación del Estado Miranda, 1981); José Marcial Ramos Guédez, El negro en Venezuela: aporte bibliográfico (Caracas: UCV, 1985), José Marcial Ramos Guédez, De la Révolution française aux révolutions créoles et négres (Paris: Laval, 1989); José Marcial Ramos Guédez, Bibliografía y hemerografía sobre la insurrección de José Leonardo Chirino en la Sierra de Coro (Caracas: USM, 1996); José Marcial Ramos Guédez, Simón Bolívar y la abolición de la esclavitud en Venezuela 1810-1830 (Caracas: USM, 1999), entre otros.
11 José Marcial Ramos Guédez, La Contribución a la historia de las culturas negras en Venezuela colonial (Caracas, USM, 1993) Trabajo realizado bajo tutoría el Maestro de la Escuela de Historiadores, Federico Brito Figueroa, que recupera aportes afrolinguísticos, afrogeomentales y afrogeohistóricos, recuperando los imaginarios y creencias a nivel nacional. Las diversas herencias de raíces africanas, destacadas son: carabalíes, congos, bantúes, gabones y malambas.
12 Pedro Manuel Arcaya, Insurrección de los negros de la serranía de Coro. (Caracas, Instituto Panamericano de Geografía e Historia, 1949)7.
13 Miguel Acosta Saignes: "Los negros cimarrones de Venezuela", en: El movimiento emancipador de Hispanoamérica. Actas y ponencias. (Caracas: Academia Nacional de la Historia, 1961) T. III, 352-398.
14 Federico Brito Figueroa, El problema tierra y esclavos en la historia de Venezuela. (Segunda edición. Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1984). Federico Brito Figueroa, La emancipación nacional y la guerra de clases y castas. (Caracas, Universidad Santa María, 1982). Federico Brito Figueroa, La estructura económica de Venezuela colonial. (Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1983) 55-65, 83-126, 265-327. Federico Brito Figueroa, Historia de la esclavitud negra en Venezuela y el Caribe. (Caracas: Universidad Santa María-Centro de Investigaciones Históricas, 1987).
15 Eduardo Arcila Farías, Economía colonial de Venezuela. (Caracas: Italgráfica, 1973) T. II, 143-185. Eduardo Arcila Farías, El primer libro de Hacienda Pública colonial de Venezuela, 1529-1538. (Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1979).
16 Germán
Carrera Damas, "La supuesta empresa antiesclavista del conde de Tovar y la
formación del peonaje: estudio crítico del testimonio de Humboldt".
(Caracas: Separata del Anuario del Instituto de Antropología e Historia, 1965).
Germán
Carrera Damas, La crisis de la sociedad colonial venezolana. (Caracas,
Monte Ávila Editores, 1985, pp. 20-23 y 29-36. Germán Carrera Damas: "Huida y
enfrentamiento", en: África en América Latina, ed. Manuel Moreno
Fraginals. (México: Organización de las Naciones Unidas para el Avance de
la Ciencia, la Cultura y la Educación (UNESCO- Siglo XXI Editores,
1977). 40-68.
Germán
Carrera Damas, La crisis de la sociedad colonial venezolana. (Caracas,
Monte Ávila Editores, 1985) 20-23 y 29-36
17 Reinaldo
Rojas, "Rebeliones de esclavos negros en Venezuela antes y después de 1789",
Revista Principia, (12) 1994: 27-36.
Reinaldo
Rojas, Historiografía y Política sobre el Tema Bolivariano. (Barquisimeto: Fundación Buría y Ateneo Ciudad de Barquisimeto, 1999).
18 Reinaldo Rojas, La rebelión del Negro Miguel y otros estudios de africanía (Barquisimeto: Zona Educativa del Estado Lara/Fundación Buría, 2004) 216. El autor se pronuncia por el estudio de la "africanía", y recupera el alzamiento del Negro Miguel en Buría, la esclavitud en la Región Barquisimeto o la "República de los Zambos" de Nirgua. La segunda es plenamente historiográfica; junto al estudio sobre la obra de José Marcial Ramos Guédez, hay aproximaciones a Fernando Ortiz, Miguel Acosta Saignes y Federico Brito Figueroa. La tercera presenta "tres documentos fundamentales", según anuncia su título: el Código Negro de 1789, la Proclama de Ocumare de 1816 y la Ley de Abolición de la Esclavitud de 1854. Y la cuarta es la Conferencia magistral que abrió la X Jornada sobre Investigación y Docencia en la Ciencia de la Historia el 23 de julio de 2003: "La rebelión del Negro Miguel y su trascendencia en el tiempo".
19 Recordamos también la tesis doctoral que tuve el honor de conducir como tutor, de la afrodescendiente colombiana Lucy Gómez Mina, "Los Afrodescendientes en las Políticas Educativas de la Constitución de la república Bolivariana de Venezuela" (Rubio: Doctorado en Educación en la Universidad Pedagógica Libertador IPRGR, 2010). Debo decir que la experiencia académica de esta tesis abrió espacios para los estudios comparados sobre el tratamiento de los afrodescendientes en la frontera colombo-venezolana, los cuales hemos seguido desarrollando en múltiples eventos nacionales e internacionales.
20 Diógenes Díaz, "Por el ánimo de los dioses afrovenezolanos", Revista Faces. Año 2, nro 6, (1991): 154.
21 Ebert Cardoza Sáez, "La participación de los negros en la milicia colonial segregación étnica y pugnas interclasistas", en 1854-2004:150 años de la Abolición de la Esclavitud, eds. Hernán Lucena Molero y Julio César Taliaferro (Mérida: CDCHT, Consejo de Estudios de Postgrado, Centro de Estudios de África y Asia "José Manuel Briceño Monzillo", Centro de Estudios Históricos "Carlos Emilio Muñoz Oraá", 2007). También Cfr. Ebert Cardoza Sáez y Rita Manrique Flores, La composición étnico-social de las milicias en Venezuela colonial y la formación del Ejército Republicano. (Mérida: Universidad de Los Andes, Escuela de Historia, 1992) 148.
22 Revista Heurística, No. 15, (2015).
23 Cfr. José Pascual Mora García, "Nación, Representaciones colectivas y Cultura tachirense" en Imaginarios, Educación y Nación, hacia la reinvención de nuestra América. (Rubio: UPEL-IPR-Gervasio Rubio, 2005).
24 Cfr. José Pascual Mora García, Imaginario Social Bolivariano. (San Cristóbal: Fondo Editorial Simón Rodríguez, 2006)
25 José Pascual Mora García... 24
26 Cfr. Colecciones de la Academia Nacional de la Historia. Y aunque hay trabajos que permiten destacar la presencia de la mujer, los temas se detienen en narraciones sobre las patologías sociales que arrastran por pertenecer o haber realizado labores que tienen un estigma social. Es decir, a pesar de la visibilización hay una lectura tendenciosa que hace presentar a la mujer no por su valor en sí mismo, sino por haber sido objeto de un accidente en la historia.
27 Hay libros que no obstante recuperar la presencia de la mujer ocultan la presencia de la mujer afrodescendientes en la construcción de la nación, o aborda la historia de la mujer por haber sido parte de la nobleza criolla o mantuanaje. Cfr. Inés Quintero, Las mujeres de Venezuela. Historia mínima. (Caracas: Fundación de los Trabajadores Petroleros y Petroquímicos de Venezuela, 2003)
28 Cfr. Ermila Troconis de Veracochea, Gobernadoras, cimarronas, conspiradoras y barraganas. (Caracas: Trópicos Alfadil, 1998); Ermila Troconis De Veracoechea, Indias, esclavas, mantuanas y primeras damas. (Caracas: Alfadil. Academia Nacional de la Historia, 1990); Ermila Troconis de Veracoechea, ed. La mujer en la historia de Venezuela. (Caracas: Congreso de la República, 1992).
29 Cfr. Elías Pino Iturrieta, Contra lujuria castidad. (Caracas: Alfadil Editores, 1992).
30 Cfr. Inés Quintero, La criolla principal Maria Antonia Bolívar, hermana del Libertador. (Caracas: Fundación Bigott, 2003).
31 Edda Samudio, "Los estudios de historia de la mujer en América Latina y Venezuela. Perspectivas de desarrollo" Revista Heurística, nro 16, (2013): 193.
32 La «generación del 28» es un movimiento de carácter académico y estudiantil contra el régimen de Juan Vicente Gómez. Inicialmente lo integraron jóvenes de la Universidad Central pero luego lo promueven la Federación de Estudiantes de Venezuela. En el seno se aclimata la semilla del Partido PDN, génesis de Acción Democrática, partido del cual Argelia Laya formará parte en 1945. Cfr. María de Lourdes Acedo De Sucre, y Carmen Margarita Nones Mendoza. La generación venezolana de 1928: estudio de una élite política. (Caracas: Fundación Carlos Eduardo Frías, 1994); Manuel Acosta Silva, Historias del 28. (Caracas: Escuela Técnica Popular Don Bosco, 1976); Eduardo Arcila Farías, 1928: hablan los protagonistas. (Caracas: Fondo Editorial Tropykos, 1990); Socorro Armas, "La generación del 28, la FEV y el movimiento político de 1936" en AAVV Partidos, democracia y revolución. (Caracas: Consejo Supremo Electoral, 1992); Carlos Fernández, Hombres y sucesos de mi tierra, 1909-1935. (Madrid: Talleres del Sagrado Corazón, 1969); Joaquín Gabaldón Márquez, Memoria y cuento de la generación del 28. (Caracas: Concejo Municipal del Distrito Federal, 1978.)
33 Cfr. Palabras de Argelia Laya, "Guión del Grupo Feminista 'Miércoles'", (Caracas: UCV, 1987) 24. (Original), en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9, (1998) 46.
34 Luis Beltrán Prieto Figueroa (La Asunción- Estado de Nueva Esparta, Venezuela en 1902). Profesor, jurista, escritor y destacado político venezolano. En 1932, fue profesor de castellano en el Liceo Andrés Bello y en el Colegio Católico Venezolano. En 1934, se graduó como Doctor en Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Central de Venezuela con una tesis de grado sobre la Delincuencia Precoz. En 1936, fue fundador de la Federación Venezolana de Maestros (F.V.M), funda el Partido Democrático Nacional (PDN). Ministro de Educación en 1948. Fue profesor en La Habana (1950-1951) y Costa Rica en Misión de Técnica de la UNESCO (1951-1955). Senador de la República en los períodos (1959-1964 y 1964-1969), fundador del INCE; Presidente del Congreso Nacional (1962-1967). Muere en Caracas en 1993.
35 Renée Laya, Palabras de Argelia Laya, del Grupo Feminista "Miércoles" en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3, No. 9, (1998) 46. Centro de Estudios de la Mujer. Universidad Central de Venezuela. Luciana McNamara, "Argelia Laya: La voz que no calla" en http://encontrarte.aporrea.org/82/personaje/. (17/05/2014)
36 Ibídem.
37 Cfr. José Pascual Mora-García, "Rómulo Betancourt: forjador del imaginario democrático venezolano" Revista Tiempo y Espacio. v. 18 No. 49 (2008). "En este trabajo se desarrollan algunos de los imaginarios que han actuado en la construcción simbólica de democracia venezolana en el siglo XX. En especial se analizan sobre la base de la figura patriarcal de Rómulo Betancourt (1908-1981) quien prefiguró y desarrolló en su discurso político una comprensión sociopolítica que ha servido de estructurante originario del imaginario político venezolano" 32 http://www.scielo.org.ve/scielo.php?pid=S1315-94962008000100002&script=sci_arttext&tlng=pt, (18/05/2014)
38 Renée Laya, Palabras de Argelia Laya, en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3, No. 9, (1998) 46. Centro de Estudios de la Mujer. Universidad Central de Venezuela.
39 Rómulo Betancourt, Venezuela política y petróleo. (Caracas: Monte Ávila, 1986) 497.
40 Cfr. José Pascual Mora-García, "Leonardo Ruiz Pineda, el alma de la democracia venezolana del siglo XX". Revista Filosofía No. 24, (2013).
41 En 1931 aparece el Plan de Barranquilla, bajo la autoría de Betancourt y de la Agrupación Revolucionaria de Izquierda (ARDI), manifiesto de clara tendencia comunista. Este manifiesto fue concebido desde el exilio de la agrupación como el proyecto político de Rómulo Betancourt; es la fuente de inspiración ideológica de la cual nace en 1936 el Movimiento de organización Venezolana (ORVE), proveniente del ARDI, pasada organización de izquierda del grupo de exiliados que acompañaron a Betancourt en la resistencia anti-gomecista. Años más tarde nacería el partido político bajo la denominación de Acción Democrática, organización legalizada durante el gobierno del General Isaías Medina Angarita en 1941. Es con aquel documento intitulado Plan de Barranquilla de Rómulo Betancourt, que llegan las primeras ideas de izquierda a nuestro país en el siglo XX.
42 Renée Laya, Palabras de Argelia Laya en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3, No. 9, (1998): 46.
43 Ibídem.
44 Es de resaltar que el entonces ministro de educación, Luis Beltrán Prieto Figueroa, asumió el poder por unos meses, pues fue derrocado el Presidente Rómulo Gallegos en 1948. Es bueno precisar este dato en la reseña ya que conociendo la sensibilidad de Prieto Figueroa, el primer ministro de educación afrodescendiente, es imposible que no haya considerado este derecho inalienable de la mujer. Máxime cuando fue autor de trabajos en esa dirección. En 1936 escribe Psicología y canalización del instinto de lucha demostrando su oficio como investigador social, integrando el pensamiento del psicoanálisis y la pedagogía activa. En sus intervenciones de los encuentros de maestros desarrolló los ideales fundamentales para la ética profesional del magisterio y la responsabilidad social de la educación, expresados en trabajos como El Estado Docente, La Universidad, e Ideales y deberes juveniles. Durante el denominado trienio octubrista (1945-1948) su liderazgo sirvió para incrementar los beneficios sociales, tales como: creación de comedores escolares, casas cunas, proyectos de alfabetización para obreros, fundación de escuelas normales para los técnicos; estos fueron algunos de sus logros. Son tiempos en que apenas se iniciaba el reconocimiento de la mujer como ciudadano, pues recién en 1947 se le permitió votar a la mujer para elegir al presidente de la república.
45 Citado de Palabras de Argelia Laya en "Argelia Laya, por ejemplo", del Grupo Feminista "Miércoles", 1987. p. 24. (Original), en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3, No. 9, (1998): 47.
46 Ibídem.
47 Citado de Palabras de Argelia Laya en "Argelia Laya, por ejemplo", del Grupo Feminista "Miércoles", 1987. 24 pp. (Original), en Gioconda Espina, "Argelia Laya, por ejemplo" Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3 No. 9, (1998): 47. Centro de Estudios de la Mujer. Universidad Central de Venezuela.
48 Gustavo Medina Aguillón "El PCVy aquél 23 de Enero..." en Semanario Aporrea (Lunes, 21/01/2008 02:24 PM). http://www.aporrea.org/ideologia/a49677.html
49 Este congreso tuvo la particularidad de captar a las mujeres y, asimismo, los conflictos internos, como sujetos revolucionarios. Cfr.
Adriana María Valobra, A. M. Mujeres-sombra" y "Barbudas" Género y política. Santiago de Chile: Congreso Latinoamericano de
Mujeres, 1959. Anuario del Instituto de Historia Argentina, (14). Recuperado a partir de: http://www.anuarioiha.fahce.unlp.edu.ar/article/view/IHAn14a06 (17/05/14)
50 Testimonio de Fidel Ernesto Vázquez 89 años del natalicio de nuestra siempre querida Argelia Laya, "La Comandante Jacinta" en Aporrea (Viernes, 10/07/2015 06:03 p.m.) http://www.aporrea.org/actualidad/a210572.html
51 Beatriz Domínguez Monagas, Argelia,... Tejiendo utopías, haciendo realidades. Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3 No. 9, (1998). Centro de Estudios de la Mujer. Universidad Central de Venezuela. http//cem.ve.tripod.com/jornadasdelcem/id14.html. (18/05/14).
52 Las políticas públicas del Estado venezolano en materia de salud han sido impulsadas por la Misión Barrio.
53 Cfr. Teresa Soto, "La-maestra Argelia Laya desde lo cotidiano" (Caracas: Wordpress, 2010) http://palabrademujer.wordpress.com/2010/04/03/ 16/05/14
REFERENCIAS
Acuña, Guido. La esclavitud: el negro Guillermo de Barlovento. Caracas, Pomaire, 1993.
Acosta Saignes, Miguel. Vida de los esclavos negros en Venezuela, Valencia: Vadell Hermanos, 1984.
Acosta Saignes, Miguel. "Los negros cimarrones de Venezuela", en AAVV, El movimiento emancipador de Hispanoamérica. Actas y ponencias. Caracas: Academia Nacional de la Historia, 1961.
Álvarez, Ofelia, "Maestra, Comandanta, Diputada, Orientadora, Concejal: La Argelia que conocí», Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
Arcaya, Pedro Manuel. Insurrección de los negros en la serranía de Coro. Caracas:, S/. Edit., 1949.
Arcaya, Pedro Manuel. Insurrección de los negros de la serranía de Coro, Caracas: Instituto Panamericano de Geografía e Historia, 1949.
Arcila Farías, Eduardo. Economía colonial de Venezuela. Segunda edición. Caracas: Italgráfica, 1973.
Arcila Farías, Eduardo. El primer libro de Hacienda Pública colonial de Venezuela, 1529-1538. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1979.
Ascencio, Michelle. "La dolorosa rebelión negra" República del Este. I, 2 (1980).
Ascencio, Michelle, Entre santos y changó. La herencia de la plantación, Caracas: Ediciones Faces-UCV, 2001.
Blanco, Alberto Navas y Moreno Martínez, Juan. La insurrección de los esclavos negros en Buría, 1552-1553. Caracas: Universidad Central de Venezuela- Escuela de Historia 1980.
Blanco Sojo, Jesús Alberto. Miguel Guacamaya: capitán de cimarrones. Caracas, Asociación para la Investigación Cultural Mirandina, 1991.
Brito Figueroa, Federico. El problema tierra y esclavos en la historia de Venezuela. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1984.
Brito Figueroa, Federico. La emancipación nacional y la guerra de clases y castas. Caracas: Universidad Santa María, 1982.
Brito Figueroa, Federico. La estructura económica de Venezuela colonial. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1983.
Brito Figueroa, Federico. Historia de la esclavitud negra en Venezuela y el Caribe. Caracas: Universidad Santa María-Centro de Investigaciones Históricas, 1987.
Cadenas, José María. "Argelia Laya, una lección de constancia", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3 No. 9 (1998).
Carrera Damas, Germán. La supuesta empresa antiesclavista del conde de Tovar y la formación del peonaje: estudio crítico del testimonio de Humboldt. Caracas, Separata del Anuario del Instituto de Antropología e Historia, 1965.
Carrera Damas, Germán. "Huida y enfrentamiento", en: Africa en América Latina. Manuel Moreno Fraginals. (México, Organización de las Naciones Unidas para el Avance de la Ciencia, la Cultura y la Educación (UNESCO)- Siglo XXI Editores, 1977).
Carrera Damas, Germán. La crisis de la sociedad colonial venezolana. Caracas, Monte Ávila Editores, 1985.
Castillo Lara, Lucas Guillermo. Apuntes para la historia colonial de Barlovento, Caracas: Academia Nacional de la Historia, 1981.
Domínguez Monagas, Beatriz. "Argelia,... Tejiendo utopías, haciendo realidades", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
Díaz, Diógenes. "Por el ánimo de los dioses afrovenezolanos", Revista Faces Universidad de Carabobo. Vol. 2. No. 6 (1991).
Espina Gioconda. "Argelia Laya, por ejemplo", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
García, Jesús. "Encuentro y desencuentro de los saberes. En torno a la africanía latinoamericana", en Estudios y otras prácticas intelectuales latinoamericanas. Coord. Daniel Matos. (Faces-UCV, 2002).
García, Jesús. Comunidades afroamericanas y transformaciones sociales Caracas: Clacso-UNESCO. 2002.
García, Jesús. De construcción, transformación y construcción de nuevos escenarios de las prácticas de la Afroamericanidad. Caracas: Clacso-UNESCO, 2001.
Gil Fortoul, José. Historia Constitucional de Venezuela. Caracas: Ediciones Sales, 1984.
Jiménez G., Morella A. La esclavitud indígena en Venezuela (Siglo XVI). Caracas: Academia Nacional de la Historia, 1986.
José Núñez, Ponte Manuel. Estudio histórico acerca de la esclavitud y de su abolición en Venezuela. Caracas: Tipografía El Cojo, 1911.
Landaeta Rosales, Manuel. La libertad de los esclavos en Venezuela. Caracas: Imprenta Bolívar, 1895.
Laya Boving, Renée. "Mi Hermana Argelia". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
León, María. "Argelia, amiga y luz en el camino", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
Lombardi, John V., Decadencia y abolición de la esclavitud en Venezuela, 1820-1854. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1974.
Márquez, Rondón, R.A. La esclavitud en Venezuela: el proceso de su abolición y las personalidades de sus decisivos propulsores: José Gregorio Monagas y Simón Planas. Caracas: Tipografía Garrido, 1956.
Merola, Giovanna. "La gran Argelia". Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
Parra Márquez, Héctor. Centenario de la abolición de la esclavitud en Venezuela. Caracas: Imprenta Nacional, 1954.
Parra Pérez, Caracciolo. El régimen español en Venezuela. Estudio histórico. Madrid: Ediciones Cultura Hispánica, 1964.
Poliak Elte, Angelina. La familia negra en Venezuela. Caracas: Monte Ávila Editores 1976.
Ramos Guédez, José Marcial. Simón Bolívar y la abolición de la esclavitud en Venezuela 1810-1830. Los Teques: Centro de Investigaciones Bibliográficas Venezolanas, 1999.
Ramos Guédez, José Marcial y Mendoza, Irma. José Silverio González y la abolición de la esclavitud en Venezuela, 1850-1854. Caracas: Universidad Santa María, Centro de Investigaciones Históricas, 1990.
Rojas, Reinaldo "Rebeliones de esclavos negros en Venezuela antes y después de 1789", Revista Principia. Revista de Cultura de la Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado. No. 1 (1994).
Walte, Carlos. "Argelia Laya, mi colaboradora", Revista Venezolana de Estudios de la Mujer. Vol. 3. No. 9 (1998).
Mora García, José
Pascual.
"La
Maestra Argelia Laya. Aportes al imaginario afrodescendiente venezolano (1926 -
1997)".
Revista Historia de la Educación Latinoamericana. Vol. 18
No. 27 (2016): 13-34.
Fuente: http://www.psuv.org.ve/temas/noticias/10-julio-87-anos-natalicio-argelia-laya/